Quiúbole, ¿todo bien? Algo que desde muy niño me ha mantenido atrapado es la imagen del espacio, del territorio, del sitio, del lugar. Al principio solamente como una noción, ligada a una admiración tempranera de la belleza que fija la atención y los latidos, luego como un gigantesco agujero existencial, al darme cuenta de que cada sitio solo existía una vez y que no podía haber otro igual. Y después como un concepto más complejo, que tenía que explicar y admirar al mismo tiempo, con el miedo a la descripción y el pánico a las paradojas.
Muchas gracias por crear éste espacio. Hace años ya, no sé cómo, recibí otra invitación generosa e íntima de su parte. En ella le anunciaba al mundo, que cualquier persona podía coordinar con usted para ir a tomar un libro de la biblioteca personal que estaba deshaciendo por motivo de un viaje importante. Ya vivía yo en Guanacaste de cara al Pacífico, pero aun así me tentaba a trasladarme para participar de ése desperdigamiento único.
Ésta nueva invitación, igualmente linda, me encuentra frente al mar Caribe limonense, en una habitación donde todas las ventanas son también puertas. El efecto que tiene pica a la imaginación, y estoy feliz de que en ésta ocasión el intercambio sea virtual, y puedo tomar ésta ola.
Rolo lo leo sentada en el metro .de vuelta a mi casa .como cambia los lugares .los lugares compartidos por ejemplo este metro santiagueño que siempre compartimos los de a pie como dicen por acá..compartimos como sardinas con miradas suspicaces de no invadas mi espacio pero que ha partir de la pandemia ese espacio cambió esa mirada cambio seguimos con sardinas pero sardinas miedosa de no invadas mi espacio porque muero¡¡¡
Ay Rolo gracias por la belleza de tu escrito. Y por la inevitable nostalgia que vino a mi a través de tu lectura : los cerros de mi pueblo de Pozos de PURISCAL, las quebradas de Floralia donde nací y que ya no están y el higueron viejo de la casa de mis padres que no quiere morir nunca jamás. En loa cerros me encuentro cada vez que necesito un centro y a ese higueron regreso para sorber la miel de los panales de mariquita pegados al grueso tronco en un abrazo inmemorial, que tanto gusto nos dio a mi y a mis hermanas.
Hola Rolo, un gran gusto leerte como siempre, gracias por compartir conmigo tu pluma; es realmente bella! Un fuerte abrazo virtual que transforme tu espacio y tiempo con muchas buenas vibras.
Muchas gracias por crear éste espacio. Hace años ya, no sé cómo, recibí otra invitación generosa e íntima de su parte. En ella le anunciaba al mundo, que cualquier persona podía coordinar con usted para ir a tomar un libro de la biblioteca personal que estaba deshaciendo por motivo de un viaje importante. Ya vivía yo en Guanacaste de cara al Pacífico, pero aun así me tentaba a trasladarme para participar de ése desperdigamiento único.
Ésta nueva invitación, igualmente linda, me encuentra frente al mar Caribe limonense, en una habitación donde todas las ventanas son también puertas. El efecto que tiene pica a la imaginación, y estoy feliz de que en ésta ocasión el intercambio sea virtual, y puedo tomar ésta ola.
Rolo lo leo sentada en el metro .de vuelta a mi casa .como cambia los lugares .los lugares compartidos por ejemplo este metro santiagueño que siempre compartimos los de a pie como dicen por acá..compartimos como sardinas con miradas suspicaces de no invadas mi espacio pero que ha partir de la pandemia ese espacio cambió esa mirada cambio seguimos con sardinas pero sardinas miedosa de no invadas mi espacio porque muero¡¡¡
Ay Rolo gracias por la belleza de tu escrito. Y por la inevitable nostalgia que vino a mi a través de tu lectura : los cerros de mi pueblo de Pozos de PURISCAL, las quebradas de Floralia donde nací y que ya no están y el higueron viejo de la casa de mis padres que no quiere morir nunca jamás. En loa cerros me encuentro cada vez que necesito un centro y a ese higueron regreso para sorber la miel de los panales de mariquita pegados al grueso tronco en un abrazo inmemorial, que tanto gusto nos dio a mi y a mis hermanas.
Hola Rolo, un gran gusto leerte como siempre, gracias por compartir conmigo tu pluma; es realmente bella! Un fuerte abrazo virtual que transforme tu espacio y tiempo con muchas buenas vibras.
Usted tiene una capacidad impresionante para transportarme. Gracias por abrir la ventana...